9 de septiembre de 1947
Fue sancionada la Ley de Sufragio Femenino
El sufragio femenino en Argentina se consiguió en 1947, con la sanción de la Ley 13.010 de sufragio femenino, también conocida como ley Evita, debido a Eva Perón
Esta ley fue aprobada durante el gobierno de Juan Domingo Perón y se puso en vigencia por primera vez en las elecciones presidenciales de 1951
La ley contó con importantes antecedentes de organización a partir de finales del siglo XIX. Las primeras mujeres en ocuparse por la lucha de sus derechos cívicos, y las primeras en organizarse para ello, fueron las militantes del Partido Socialista y las integrantes del partido Unión Cívica Radical desde fines del siglo XIX y comienzo del siglo XX. Así, Elvira Rawson, Julieta Lanteri y Alicia Moreau de Justo, siguiendo el ejemplo de sus pares europeas, comenzaron a fundar, entre el 1900 y 1910, una serie de agrupaciones en defensa de los derechos cívicos de la mujer.
En los regímenes republicanos y parlamentarios modernos, la regla hasta el siglo XX, fue la exclusión total o parcial de las mujeres. La discriminación política a la que estaban sometidas las mujeres, originó desde fines del siglo XIX, un amplio movimiento feminista a favor del voto femenino (votar y ser votadas), que confluyó con la lucha por el sufragio universal y la democracia. Una tras otra las naciones del mundo fueron reconociendo los derechos políticos de las mujeres. El movimiento feminista avanzó mucho en derechos civiles, pero no fue así con los derechos políticos hasta la década de 1940, no obstante, puso a la cuestión del sufragio femenino en el debate público, y más de una vez captó la atención del debate legislativo.
A principios del 1900, varias mujeres socialistas, universitarias y damas de beneficencia, comenzaron a organizarse y a promover ciertos temas sociales y políticos.En 1906 Alicia Moreau de Justo participa en el Congreso Internacional de Libre pensamiento, donde comienza su militancia feminista. En Argentina en 1907 se creó el “Comité Pro-Sufragio femenino”, fundado por las feministas Alicia Moreau, Sara Justo, Julieta Lanteri y Elvira Rawson de Dellepiane.
En 1912, se sanciona la Ley Sáenz Peña, que establece el voto universal, secreto y obligatorio, pero excluyendo a las mujeres. En ese tiempo las posturas sufragistas se dividen entre gradualistas, que aspiran a obtener el voto femenino a nivel local, e universalistas, en lucha por la plenitud en los derechos políticos.
En 1919, Moreau de Justo asiste en Washington al Congreso nacional de Obreras, donde se relaciona con sufragistas norteamericanas. Cuando regresa a Argentina funda la Unión Feminista Nacional. Esta agrupación realizó un simulacro de voto femenino en el marco de las elecciones legislativas de 1920.
El primer proyecto de ley nacional fue presentado por el diputado radical por Santa Fe Rogelio Araya en 1919, seguido luego de muchos otros que ni siquiera fueron tratados por las cámaras del Congreso Nacional. En 1932, durante el gobierno de Agustín P. Justo, se debate un proyecto de ley de sufragio femenino en la Cámara de Diputados Nacional. La bancada socialista lo sostiene con apoyo de varios radicales. En medio de una gran movilización de mujeres, la Cámara de Diputados dio media sanción al voto femenino, pero el proyecto se cayó al no ser tratado por el Senado.
En la Cámara de Diputados hubo un gran trabajo de Eva Duarte y del diputado Alcides Montiel para que se aprobara la ley. La ley fue sancionada el 9 de septiembre de 1947 y promulgada el 23 de septiembre, estableciendo este último como el Día Nacional de los Derechos Políticos de la Mujer, fecha en la que se reconoció la igualdad de derechos políticos entre mujeres y hombres, entre ellos, el derecho de las mujeres a elegir y ser elegidas para todos los cargos políticos nacionales, y estableció el sufragio universal.
